De Santo
Domingo, República Dominicana
Me puedes ver...
sin tatuajes ni tabúes,
al desnudo para ti,
como mis palabras...
al desnudo.
Desprovista de hipocresías y mentiras,
de falsías e idolatrías,
de engaños y de maldad.
Te amé al desnudo.
¡Y mi beldad ha sido mi verdad!
Como se cobija el polluelo bajo las alas maternas,
así me cobijé en ti,
buscando refugio en tus palabras que nunca fueron ciertas.
Desnudé mi alma.
Me viste sin ropas ni aparatajes,
estaba llena
¡Y me dejaste vacía!
Evangelina Valdéz
Lindisimo , un abrazo amiga .
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