martes, 1 de enero de 2013

ALEXIS MARTÍN ALEJOS


De Barquisimeto, Edo Lara-Venezuela 

AMOR PROFESO

Qué bello es recordarte
como el primer amor efebo
y sentirme abrazado de emoción,
cerrando mis ojos al soñarte
en la pasión de aquellos tiempos.

yo galanteaba tu mirada,
tu temblorosa de miedo la mía,
al creer que alguien nos veía
cuando con tus ojos me besaban
y yo con los míos te comía.

Yo encumbrado en tu delirio
con mi sana y púber picardía
para ver si tu igual sentías
tus aborujados y algodonados cariñitos
rosando tu mano gamuzada con la mía.

Eran juegos de novicios
que enviaban a tu corazón recados,
el deseo de tener enamorado
tus mejillas de sonrojado indicios
en la tibieza roborante de mis manos.

Nos latía el pecho a turbonadas
con arritmia de lacerante tropelía
y el respirar como un hilo agonizante
era deleite de un beso oxigenante
de mi boca con tu boca en rebeldía.

Tus ojos como faros apuntaban
cada espacio, lugar y sombra
que en celada furtiva de espionaje
pusiera en evidencia el andamiaje
de pasión oculta en tus alforjas.

Por eso en cada ósculo mancebo
que te dí con pasión prohibida,
recuerdo aquel sentir profeso
que núbil de amor confeso
con tus iniciales marcó mi vida.

Amaral.
Alexis Martin Alejos



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