sábado, 1 de marzo de 2014

SANTIAGO GIL ESTELLA



De Mahon-Isla de Menorca (Islas Baleares) España

VACÍO

Se terminó, sí, se terminó.

Volaron las ilusiones,
murieron las esperanzas,
se oyeron tristes canciones
que cantaban añoranzas,
y cambiamos las pasiones
por penas de nuestras almas.
¡ Y vacío quedé yo !
¡ vacío, sí,!
vacío de cuerpo y alma,
vacío de sentimientos,
vacío de corazón
y hasta vacío de alma.
Y me siento tan vacío,
tan inmensamente vacío,
que no escucho los latidos
ni cuando estoy en la cama.
Un silencio sepulcral
invade toda la estancia,
y una güadaña mortal
comunica la presencia
de algo que no es terrenal.
Es el canto apasionado
de mi último legado,
son los gritos que no salen
del vacío que hay en mí,
es tu nombre, que he olvidado,
son tus penas, que viví,
y con sigilo se esparcen
y me dejan tan vacío...
¡ Que los sonidos no salen
cuando con descaro clamo
que la muerte llegue a mí !.

Santiago Gil Estella
http://deliciosospensamientos.blogspot.com/



3 comentarios:

  1. ¡Wao, estás lleno de vacíos!
    Es doloroso leerte, porque te quiero, amigo mío.
    Besos

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  2. Un poema cuyos versos dejan una estela de tristeza y por momentos hasta de rabia y decepción.
    La poesía es la herramienta del alma, no siempre deja alegría, a veces nos traslada a otras latitudes del sentimiento.
    Me ha gustado el poema.
    Afectuosamente.
    Norma Aristeguy

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  3. Maravillosas letras Maestro.
    Como siempre, un placer leerte.
    Felicitaciones.
    Saludos.

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