De Buenos Aires, Argentina
SOL DE
NOCHE
Silencio
hay en mi nave y tras los vidrios,
La
niebla va borrando el horizonte,
Y un sol
que se mece, amortiguado
Arrulla
mi alma en su consuelo.
Un
candil enciendo en la quietud,
Escarcha
me trajo el manto oscuro,
Y el
fantasma del viento es brisa leve,
En esta
soledad, de miedo, que estremece.
De
pronto mi velero se hace Luz,
Luz de
día soleado que enceguece,
A
tientas voy buscando la cubierta
Tropiezo
de escalones y el terror.
Terror
de medusa, hecho piedra,
Terror
que desintegra la razón,
Razón
que se ha perdido y no regresa,
Gélido
aliento de mi… sangre helada.
No hay
movimiento que amenace,
Sacar mi
cuero presto, y alejarme,
De
tamaña insensata incertidumbre
Se
detienen las manitas del reloj
Ya nunca
veré más, la madrugada.
Imágenes
veloces se aceleran,
En
recuerdos que antes se escapaban.
Y de
pronto la esfera se elevó,
Como
rayo que cae en la tormenta,
Un punto
que un segundo transformó,
Lo borró
el siguiente y casi nada,
Nada más
que una estela iluminada,
En mis
ojos ciegos, desorbitados.
Lentamente
el suelo volvió a estar,
Bajo mis
pies temblando, todavía.
Y me
llego el alba a la pared,
De mi
recámara fija… en mi mirada…
Horacielo
[08/01/11]
Las
poesías de Horacielo
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